El arzobispo Piergiuseppe Vacchelli, Secretario adjunto de la Congregación para la Evangelización de los Pueblos y Presidente de las Obras Misionales Pontificias, ha abierto esta mañana la Asamblea General Anual de las OMP, que se está celebrando en la Casa de Ejercicios de los Salesianos, en Roma, del 17 al 21 de este mes de mayo.
Mons. Vacchelli, después de saludar a todos los directores nacionales de las OMP, se ha referido a los cambios en la sociedad. "Como en cada cambio histórico, nos encontramos con que tenemos que afrontar las transformaciones cualitativas de la sociedad, que, especialmente en Occidente está construyendo su cultura prescindiendo de Dios y de Cristo. Una cultura agnóstica, que quiere confinar la religión en lo privado de la propia conciencia, y en nombre de la igualdad y la paridad de derechos, llegar a negar representación pública a cualquier credo religioso. Además, nos encontramos en medio de una crisis financiera, de la que no se prevé ni el final ni el resultado. Ha creado masas de desocupados en los países industrializados, y ha hecho que las personas estén preocupadas por su porvenir, y los gobiernos ocupados solamente en resanar la economía nacional. Todo esto influye en las Obras Misionales Pontificias, y exige una reflexión seria por nuestra parte para continuar también hoy un trabajo eficaz de colaboración misionera. Es esto lo que nos proponemos hacer esta semana, que no se limita a dar cuenta de cuanto se ha hecho y a programar el futuro, sino a indicar nuevas vías más idóneas al tipo de cooperación hoy".El presidente de las OMP, en este discurso de apertura de la Asamblea general, ha hablado también sobre los Fondos de Solidaridad Universal. En este sentido ha dicho: "Una de las características que dan verdaderamente la identidad a las OMP es su capacidad de ser católica, es decir, universal. Si falla este Fondo de Solidaridad Universal, las OMP no tendrían razón de existir. [...] Por causa de la crisis financiera, y no solamente por ella, las ofertas recogidas por las Direcciones Nacionales sufren una disminución continua. [...] De igual manera, aumentan las solicitudes, con la creación de nuevas nunciaturas y diócesis, y, consiguientemente, de subsidios ordinarios, de nuevos seminarios, de financiamientos de las Direcciones Nacionales de OMP, tanto para las oficinas como para el trabajo de animación y de formación. Las cosas, naturalmente, no pueden seguir de la misma manera. Obligados por las circunstancias, debemos encontrar la valentía para volver a pensar, como Asamblea, el significado eclesial, los modos y la política de la distribución de las ofertas en el contexto de la evangelización hoy [...]".
El presidente de las OMP, ha finalizado haciendo mención a la concesión de la audiencia privada con el Papa, les ha deseado un buen trabajo y les ha dicho que "quisiera que volviésemos a ser para la evangelización una voz profética y carismática".
OMPRESS-ROMA (17-05-10)
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